Catacumbas de San Calixto
Las catacumbas de San Calixto son un cementerio que se encuentra al oeste de la Via Appia Antica, después de la iglesia del "Quo Vadis".
Empezaron a existir hacia la mitad del siglo II y forman parte de un complejo que ocupa una extensión de 15 hectáreas, con una red de galerías de casi 20 km en distintos pisos, y alcanzan una profundidad superior a los 20 metros. En ellas se enterraron a decenas de mártires, 16 pontífices y muchísimos fieles cristianos.
Reciben su nombre del diácono (más tarde, papa) San Calixto, designado a principios del siglo III por el Papa Ceferino como administrador del cementerio. De ese modo, las catacumbas de San Calixto se convirtieron en el cementerio oficial de la Iglesia de Roma.
En la superficie se ven dos pequeñas basílicas con tres ábsides, llamadas por ello "Tricoras". En la oriental se inhumó probablemente al papa San Ceferino y al joven mártir de la Eucaristía, San Tarcisio.
El cementerio subterráneo consta de distintas áreas. Las Criptas de Lucina y la zona llamada de los Papas y de Santa Cecilia son los núcleos más antiguos (siglo II). Las otras zonas reciben el nombre de San Milcíades (mitad del s. III), de San Cayo y San Eusebio (finales del s. III), Occidental (primera mitad del s. IV) y Liberiana (segunda mitad del s. IV) con muchas criptas importantes.
Nueva web sobre las Catacumbas de San Calixto en Roma
El complejo de las Catacumbas de San Calixto es uno de los más antiguos, más amplios y mejor conservados de Roma. Se halla en la Vía Appia Antica y guarda importantes testimonios de la cristiandad, ya que allí fueron sepultados 16 pontífices, decenas de mártires y muchos cristianos.
Con el paso de los siglos, en el año 1930, la Santa Sede confió su cuidado a la Congregación Salesiana de Don Bosco, que recientemente presentó la nueva web de las Catacumbas de San Calixto.
La web, como destaca la agencia ANS de los Salesianos, «se coloca como instrumento de acceso a este magnífico patrimonio: noticias sobre la historia y el simbolismo de las catacumbas, la descripción de caminos y ambientes, referencias, inscripciones, anécdotas historiográficas, interpretaciones arqueológicas (...) Junto a las secciones de información práctica que necesitan los peregrinos».
La web, a la que se accede desde www.catacombe.roma.it, está disponible en seis idiomas: italiano, inglés, español, alemán, francés y polaco; dando importancia a la parte visual, con imágenes destacadas de las Catacumbas de San Calixto.
«El portal se caracteriza por una fuerte impresión visual y se puede captar la atención con imágenes sorprendentes de todo el complejo», subraya al respecto ANS.
Dos son las secciones principales que contiene la nueva web: «Las Catacumbas de San Calixto», que a la vez agrupa las subsecciones de «Los Orígenes de las Catacumbas» y «Los Símbolos»; y la que lleva por título «Explora los Caminos», con las subsecciones «La cripta de los Papas», «La cripta de Santa Cecilia», «Los cubículos de los Sacramentos», «La zona llamada del Papa Milcíades» y «La región de San Cayo y Eusebio».
Entre las opciones que ofrece el portal, está la posibilidad de gestionar las reservas para la visita de las Catacumbas, la cual se debe realizar para grupos de al menos 15 personas. Visitantes individuales no requieren de reserva previa.
Las visitas pueden incluir, además del recorrido por el complejo de las Catacumbas, la participación en la celebración Eucarística con horarios de misas a partir de las 9:00 a las 11:00, y de las 14:00 hasta las 15:30, todos los días, exceptuando el miércoles, cuando las Catacumbas no abren al público.
Orígenes de las catacumbas
Los orígenes de las catacumbas se remontan a la primera mitad del siglo II cuando los cristianos enterraban a sus muertos bajo tierra. Muchas de ellas, que se ampliaron alrededor de los sepulcros familiares, comenzaron a ser reservadas por sus propietarios recién convertidos para otros hermanos en la fe.
Con el tiempo, por iniciativa de la propia Iglesia, cuando adquiere los terrenos, las catacumbas se amplían y se organizan con carácter comunitario, como es el caso de las Catacumbas de San Calixto.
Las Catacumbas funcionaron como cementerios hasta principios del siglo V, cuando los entierros pasan a realizarse en la superficie.