Domingo Obiols Rovira (1894-1936) coadjutor

Nacimiento: SANT HIPOLIT DE VOLTREGA (Barcelona), 20-9-1894

Inicio noviciado: BLANES, 21-9-1914

Primera profesión: BLANES, 22-10-1916

Profesión perpetua: REUS, 24-10-1919

Defunción: SANT HIPÓLIT DE VOLTREGA, 18-8-1936

Domingo Obiols, hijo de Hipólito y María, nació en Sant Hipòlit de Voltregà (Barcelona) el día 20 de septiembre de 1894.

Quizás por influencia del colegio Sagrada Familia de su misma población y, sobre todo del de Sant Julià de Vilatorta, entró en contacto con la Congregación e ingresó en el colegio Nazareno, de Blanes hacia 1913. Vistió el hábito e inició el noviciado en calidad de coadjutor el día 21 de septiembre de 1914, juntamente con el P. Pedro Altesa, durante el período de la restauración teatina. La Sagrada Familia dijo de un modo tan explícito la primera vez: «En la iglesia de nuestra casa-noviciado, el próximo pasado día 21, festividad del apóstol y evangelista San Mateo, emitieron sus votos los novicios Epifanio Lorda, Fernando Lorda, Emilio Roure, Pedro Virgili, Saturnino Mas y José Bellvé. Vistieron también el santo hábito los postulantes Martín Grivé, José Planas, Jaime Cubells, Pedro Altesa, José García, Carlos Buira, Domingo 0biols y Pablo Bonell. Verificó la ceremonia el M. Rdo. P. Superior de la casa (Buenaventura Mullol) quien pronunció una conmovedora plática alusiva a las excelencias y deberes del estado religioso. A todos nuestra cordial enhorabuena, suplicando que las nuevas gracias recibidas sean poderoso aliento a su celo para trabajar en la viña del Señor».

La mayor parte de estos postulantes procedían de la clausurada comunidad del Santuario de Nuestra Señora de Sancho Abarca, de Tauste. Domingo Obiols había hecho su aspirantado en Blanes, y aquí completó su formación ulterior hasta la profesión. A pesar de ser coadjutor estuvo dedicado fundamentalmente a la enseñanza de los niños pequeños y a otras actividades escolares.

Todos los hermanos novicios firmaron las consabidas preces para conseguir la restauración del Instituto, pero llegado el momento de declarar el por qué al visitador, el P. Buenaventura Mullol lo hizo por todos ellos porque «los ocho firmaron sin enterarse de nada. Sin embargo. —anotó el visitador—, sabemos por el estudiante (Saturnino) Mas que el superior de esta casa les reunió y les explicó las referencias del P.Luis Tallada desde Roma».

Después de la restauración del Instituto, el hermano Obiols siguió en Blanes y allí emitió la profesión temporal el día 22 de octubre de 1916. Era superior el P. Francisco Mascaró, maestro de novicios el P. José Terés, y prefecto de aspirantes, el P. Juan Doménech.

En el curso 1918-19 estuvo en el colegio Jesús, María y José, de Sant Andreu, pero al curso siguiente fue destinado al colegio San Pedro Apóstol, de Reus, en donde el 24 de octubre de 1919 hizo la profesión perpetua. Era el superior el P. Salvador Gené y, a partir de 1920 cuando el P. Gené regresó a los Estados Unidos, el P. Francisco Mascaró, que conocía bien al hermano Domingo.

El colegio San Pedro Apóstol, de Reus, saltaba a la prensa local o en La Sagrada Familia muy a menudo, principalmente por la fiesta de la Sagrada Familia, que celebraban juntos comunidad, alumnos, exalumnos, asociados de la VMD, cooperadores y señoras del ropero de la Sagrada Familia. Efectivamente, como decía La Sagrada Familia en 1922, «son ya legión en esta industriosa y comercial ciudad los devotos de la Augusta Trinidad de la tierra». Importantes también, el concurso científico-literario que organizaron en el curso 1921-22, la fiesta anual de la primera comunión, etc. Una experiencia rica para el hermano Obiols que, además de los trabajos manuales (parece que era alpargatero de oficio), atendía también a una clase elemental.

Después del capítulo general de 1922, fue destinado al colegio San José, de Tremp, del que era superior el P. Antonio Carrió, primero, y luego el P. Saturnino Mas, a partir del curso 1928-29.

La larga estancia del hermano Obiols en Tremp coincidió con acontecimientos importantes y singulares de la ciudad que, corno casi todos los de Tremp, repercutían también en la vida del colegio y aún de la misma Congregación. El 8 de septiembre de 1922, se procedió a la inauguración de la restauración de la iglesia parroquial y a la coronación canónica de la Virgen de Valldeflors. Naturalmente La Sagrada Familia con el padre general y otros varios sacerdotes estuvieron en la fiesta y escribió esta crónica: «Tremp, antigua capital del Pallars, patria de nuestro ilustre Padre Fundador y cuna de la Congregación de Hijos de la Sagrada Familia, acaba de escribir una de las páginas más gloriosas de su historia. Habiéndose restaurado y notablemente embellecido su antigua colegiata gracias a la actividad de su celoso párroco. D. José Roca, y a la munificencia de varios patricios.... organizáronse solemnes festejos para celebrar la inauguración de las obras y para dar realce a la coronación canónica de su celestial Patrona. Hubo la solemne misa en que ofició de pontifical el ilustrísimo obispo de Urgell, Justino Guitart, predicó magnífico sermón nuestro Rdmo. General, Luis Tallada, y realzaron notables elementos musicales, y al final la imponente coronación a la venerada imagen con rica corona de oro y valiosísima pedrería procedente del tesoro de la casa Sullà… Celebráronse fiestas literarias y profanas, siendo especialmente notable la celebrada en nuestro colegio San José, presidida por el Sr. Obispo, alcalde Sr. Picart y Rdmo. P. Luis Tallada, y la que organizó el maestro D.J. Cortada...».

En septiembre de 1923, fue testigo de otros acontecimientos importantes: la concesión del título de Basílica menor a la antigua iglesia colegiata y la dedicación de un paseo a la memoria del Padre Fundador. Fue mérito de la Congregación la concesión de esta gracia pontificia y benevolencia del Ayuntamiento la honra cívica al Padre Manyanet.

Por último, en junio de 1929, asistió también al ofrecimiento de los hábitos prelaticios a Mons. José Roca, párroco, otorgados por mérito también de la Congregación, y a la inauguración del Casal de la población.

Después del capítulo general de 1932, el hermano Obiols fue trasladado de nuevo al colegio San Pedro Apóstol, de Reus, en donde permaneció apenas durante dos cursos escolares. De allí fue mandado al colegio Santa María, de Blanes en el curso 1934-35, precisamente en el momento en que la junta de propietarios del edificio del colegio había formado una mutua, corriendo a nuestro cargo la enseñanza. «Por lo que respecta a este colegio —escribía el P. Samá—, por las actuales circunstancias, no se ha creído prudente terminar los trabajos encaminados a conseguir el reconocimiento por parte de dicha junta del crédito que por efecto de mejoras tiene contra la misma la Congregación». Pero los hechos se precipitaron y estalló la guerra civil. El hermano Obiols ya estaba, sin embargo, en el colegio Jesús, María y José de Sant Andreu.

Desde Barcelona pudo llegar hasta su pueblo natal, en la plana de Vic, reuniéndose con tres religiosos de La Salle en un piso que les cedió el Rdo. D. Juan Camps. Allí mantuvieron todas las prácticas religiosas de la vida de comunidad durante todo el tiempo de cautiverio. Asaltado el domicilio el 18 de agosto de 1936, fue detenido con los hermanos Honorato Alfredo y Olegario Ángel (liberándose el hermano Agapio escondido detrás de la puerta) y trasladados en un auto en dirección a San Baudilio, fueron asesinados a unos tres kilómetros de Sant Hipòlit de Voltregà, en cuyo lugar levantaron después una pequeña cruz. Contaba 42 años de edad y 20 de profesión religiosa.

Sus restos mortales no fueron identificados pero descansan en el cementerio de Sant Hipòlit, aunque tampoco resulte inscrita su defunción en el Juzgado.

Fuentes: Expediente personal.

BOC 2 (1918, 1.) 13; 3 (1919, 1.) 13; 21 (1937, 1-3.) 8.

La Sagrada Familia 16 (1914) 308; 24 (1922) 87, 318; 25 (1923) 293; 31 (1929) 272.

ANTONIO MONTERO, Historia de la persecución religiosa en España, Madrid 1961 (BAC 204) p. 118.