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PRESENTACIÓN del Calendario Propio de los Hijos de la Sagrada Familia,
Jesús, María y José (Ed. 1986):
"El Concilio Vaticano II nos ha enseñado claramente que la celebración del misterio pascual tiene la máxima importancia en el culto cristiano y en su desarrollo diario, semanal y anual. De aquí se desprende la necesidad de poner en plena luz el misterio pascual de Cristo en la reforma del Año Litúrgico, tanto por lo que mira a la estructuración del propio del tiempo y del santoral, como por lo que se refiere a la revisión del Calendario Romano".
Con estas palabras del Motu Propio Mysterii Paschalis, Paulo VI aprobaba el 14 de febrero de 1969 el nuevo Calendario Romano general y las normas universales que tratan de regular el año litúrgico.
Nuestra Congregación, correspondiendo a la invitación de la Iglesia hecha mediante la Instrucción "de Calendariis particularibus atque officiorum et Missarum propriorum recognoscendis", de fecha 23/VI/1970, ha estudiado y estructurado el Calendario Propio de las celebraciones que le son más peculiares, con el fin de que, fieles a nuestra vocación en la oración y en la vida, vivamos más intensamente por la fe, la esperanza y la caridad “todo el misterio de Cristo desarrollado a lo largo del año”.
I - EL AÑO LITÚRGICO
La Iglesia celebra la memoria sagrada de la obra de la salvación realizada por Cristo, y lo hace en días determinados durante el curso del año. Cada semana, el domingo -que por eso se llama “día del Señor"- hace memoria de la Resurrección del Señor, memoria que vuelve a celebrar una vez al año en la máxima solemnidad de la Pascua, juntamente con su santa Pasión, mientras que durante todo el año despliega el misterio total de Cristo y conmemora los días natalicios de los santos.
Además, en diversos tiempos del año, de acuerdo con las instituciones tradicionales, la Iglesia completa la formación de los fieles por medio de ejercicios de piedad espirituales y corporales, de la instrucción, de la plegaria y las obras de penitencia y de misericordia.
El ritmo del año litúrgico de nuestra vida comunitaria está en total armonía con estas orientaciones de la Iglesia pero, fiel a las exigencias de nuestro carisma y a las enseñanzas de nuestro Fundador, pone de relieve aquellos aspectos que se refieren al misterio de la vida oculta de Jesús y no se celebran explícitamente en el calendario general. Es evidente que es el misterio pascual de Cristo el centro de nuestra vida cristiana y religiosa, pero lo vivimos desde la luz que dimana de Nazaret. Así, aunque la meta o culmen es el triduo pascual o la totalidad del misterio de Cristo, ponemos un acento especial en los tiempos de Adviento y Navidad, que prepara o celebra la Encarnación del Señor, y hacemos memoria de aquellos santos que estuvieron más vinculados a este misterio de Cristo o lo ayudaron a descubrir y a vivir a nuestro Fundador.
II - NUESTRO CALENDARIO PROPIO
Nuestro Calendario contiene las celebraciones propias, orgánica y convenientemente combinadas con el ciclo general. Ha sido aprobado por la Iglesia con fecha 8/IX/1981 (Prot.190/81) y 19/VI/1982 (Prot.210/82).
La Congregación había tenido su Calendario Propio aprobado desde 1920 (1). Contenía las fiestas de la Sagrada Familia (19/I) (entonces todavía no constaba en el calendario universal de la Iglesia), la Huida a Egipto (17/II), el Hallazgo de Jesús en el Templo (26/II), San Gabriel, arcángel (24/III), Traslación de la Santa Casa de Loreto (10/XII) y la Expectación del Parto (18/XII). Este calendario siguió prácticamente vigente hasta 1961, en que una Instrucción de la entonces Sagrada Congregación de Ritos suprimía “ciertas fiestas devocionales porque ya estaban comprendidas en otras celebraciones".
El Capítulo General de 1981, sensible a las implicaciones espirituales y doctrinales de nuestro carisma, y apoyándose en una nueva Instrucción de 1970, acordó preparar y solicitar la aprobación de nuestro Calendario Propio renovado.
La composición actual de este Calendario ha sido más bien laboriosa pero se ha conseguido conservar las memorias que pueden alimentar nuestra vida religiosa y apostólica.
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La distribución de la presente edición del Calendario Propio se ha hecho en tres partes: la primera y la segunda contienen el Propio de las Misas y algunas Misas votivas y Por diversas necesidades, y la tercera, el Propio de la Liturgia de las Horas. Les precede la relación de las aprobaciones pontificias correspondientes.
En el Calendario no se repiten, por lo general, los elementos que son propios del Misal Romano o del libro de la Liturgia de las Horas, remitiendo a las normas y rúbricas generales para su celebración. No obstante, se hace mención del santo o memoria con la nota hagiográfica que justifica su inserción en nuestro Calendario Propio.
Este Calendario no puede sustituir, naturalmente, ni al Misal Romano ni a la Liturgia de las Horas que ofrecen más variedad de celebraciones y de textos. Sólo aspira a ser un complemento y una ayuda en la profundización de nuestra espiritualidad.
Ojalá que el estudio y la observancia de este Calendario a lo largo de todo el año litúrgico, nos faciliten una penetración más intensa en el misterio de Cristo, particularmente en los años de su vida oculta en Nazaret, sujeto a María y a José, y nos dispongan a la celebración eterna celestial.
Barcelona, 30 de marzo de 1986, solemnidad de la Resurrección del Señor Jesús.
P. José Ma Blanquet, S.F. Superior General
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(1) Ya el Espíritu de los Hijos de la Sagrada Familia (Barcelona 1908), del P. Buenaventura Mullol, dedica todo un capítulo a las “Fiestas de la Congregación", que agrupa en 4 clasificaciones:
Fiestas de 1a clase:
Sagrada Familia,
San José,
Purísima Concepción de María
y Natividad del Señor),
de 2a clase:
Año Nuevo,
Epifanía del Señor,
Purificación de Nuestra Señora,
Anunciación,
Pascuas de Resurrección y Pentecostés,
Ascensión y Corpus Christi,
Patrocinio de San José,
Nacimiento de la Virgen
y fiesta patronal de! Superior General de la Congregación,
de 3a clase:
Fiestas de los santos Abogados de la Congregación
y fiesta patronal de los superiores locales
y de 4a clase:
son todas las demás no indicadas anteriormente.
Los Estudiantes, Novicios y Coadjutores ofrecerán la Sagrada Comunión por las necesidades generales de la Congregación y por las especiales del Superior General, todos los domingos, miércoles y sábados. Los demás días a su libre voluntad.
De las fiestas de 1a clase trata, con mayor detenimiento, de la Sagrada Familia, de San José, de la Purísima y Natividad del Señor. Por último, habla de la Semana Santa, de los “meses" que dedicamos a:
la Sagrada Familia (enero),
San José (marzo),
María (mayo)
y al Sagrado Corazón de Jesús (junio)
y del “Santo Patrón de nuestros alumnos", San Luis Gonzaga, “en cuya fiesta se procurará confiesen
todos y comulguen los de Comunión. Se celebrará Oficio, o cuando menos una misa rezada, que
deberán oir todos los alumnos, y por la tarde alguna función propia para honrar al Santo".
Las fiestas de la Sagrada Familia. San José, Purísima y Pascua de Pentecostés tienen sus novenarios de preparación (pp. 183-190).
Esta primera fuente del Instituto, hace pensar en un Calendario, asimilado y vivido con bastante intensidad y naturalidad al mismo tiempo, en vida del Padre Fundador, como del resto se desprende de las noticias dispersas del Epistolario y de otras de sus publicaciones. Es probable que todo eso pensase consignarlo y estructurarlo en el proyectado libro sobre las Costumbres y prácticas espirituales del Instituto que dejó incompleto en dos versiones.