Proverbios 31:10-13,19-20,30-31
¿Quién encontrará a una mujer ideal? Vale mucho más que las piedras preciosas. Su marido confía plenamente en ella, pues no carecerá de nada. Le da beneficios sin pérdidas todos los días de su vida. Adquiere lana y lino y los trabaja con finas manos. Echa mano a la rueca y sus dedos manejan el huso. Tiende sus manos al necesitado y ofrece su ayuda al pobre. Engañosa es la gracia y fugaz la belleza; sólo la mujer que respeta a Yahvé es digna de alabanza. Agradecedle el fruto de su trabajo y que sus obras la alaben en la plaza.