Mt 9,32-34: Curación de un mudo
Cf. Mateo 12, 22-24; Marcos 3,22-27; Lucas 11,14-15
32 En cuanto se fueron los ciegos, le presentaron a un mudo que estaba endemoniado.
33 El demonio fue expulsado y el mudo comenzó a hablar. La multitud, admirada, comentaba:
"Jamás se vio nada igual en Israel".
34 Pero los fariseos decían: "Él expulsa a los demonios por obra del Príncipe de los demonios".
Mt 9,35-38: Compasión de Jesús por la multitud
Cf. Marcos 3,7-12; Lucas 6,17-19
35 Jesús recorría todas las ciudades y los pueblos, enseñando en sus sinagogas,
proclamando la Buena Noticia del Reino y curando todas las enfermedades y dolencias.
36 Al ver a la multitud, tuvo compasión, porque estaban fatigados y abatidos, como ovejas que no tienen pastor.
37 Entonces dijo a sus discípulos: "La cosecha es abundante, pero los trabajadores son pocos.
38 Rueguen al dueño de los sembrados que envíe trabajadores para su cosecha".