Los auténticos discípulos de Jesús
Cf. Lucas 6,46; Lucas 13,26-27
21 No son los que me dicen: "Señor, Señor", los que entrarán en el Reino de los Cielos,
sino los que cumplen la voluntad de mi Padre que está en el cielo.
22 Muchos me dirán en aquel día: "Señor, Señor, ¿acaso no profetizamos en tu Nombre?
¿No expulsamos a los demonios e hicimos muchos milagros en tu Nombre?".
23 Entonces yo les manifestaré: "Jamás los conocí; apártense de mí, ustedes, los que hacen el mal".
Necesidad de practicar la Palabra de Dios
Cf. Lucas 6,47-49
24 Así, todo el que escucha las palabras que acabo de decir y las pone en práctica,
puede compararse a un hombre sensato que edificó su casa sobre roca.
25 Cayeron las lluvias, se precipitaron los torrentes, soplaron los vientos y sacudieron la casa;
pero esta no se derrumbó porque estaba construida sobre roca.
26 Al contrario, el que escucha mis palabras y no las practica, puede compararse a un hombre insensato,
que edificó su casa sobre arena.
27 Cayeron las lluvias, se precipitaron los torrentes, soplaron los vientos y sacudieron la casa:
esta se derrumbó, y su ruina fue grande".
Conclusión
Cf. Marcos 1,21-22; Lucas 4,31-32
28 Cuando Jesús terminó de decir estas palabras, la multitud estaba asombrada de su enseñanza,
29 porque él les enseñaba como quien tiene autoridad y no como sus escribas