La aparición de Jesús a María Magdalena
Marcos 16,9-11
11 María se había quedado afuera, llorando junto al sepulcro. Mientras lloraba, se asomó al sepulcro
12 y vio a dos ángeles vestidos de blanco, sentados uno a la cabecera y otro a los pies
del lugar donde había sido puesto el cuerpo de Jesús.
13 Ellos le dijeron: "Mujer, ¿por qué lloras?" María respondió:
"Porque se han llevado a mi Señor y no sé dónde lo han puesto".
14 Al decir esto se dio vuelta y vio a Jesús, que estaba allí, pero no lo reconoció.
15 Jesús le preguntó: "Mujer, ¿por qué lloras? ¿A quién buscas?" Ella, pensando que era el cuidador de la huerta,
le respondió: "Señor, si tú lo has llevado, dime dónde lo has puesto y yo iré a buscarlo".
16 Jesús le dijo: "¡María!" Ella lo reconoció y le dijo en hebreo: "¡Raboní!", es decir, "¡Maestro!"
17 Jesús le dijo: "No me retengas, porque todavía no he subido al Padre. Ve a decir a mis hermanos:
"Subo a mi Padre, el Padre de ustedes; a mi Dios, el Dios de ustedes"".
18 María Magdalena fue a anunciar a los discípulos que había visto al Señor y que él le había dicho esas palabras.